Dejó de estudiar la carrera por el póker, algo no siempre recomendable, y triunfó. Y eso a los 22 años de edad. Pero en el póker ya había hecho algo más que pinitos. En el EPT de Praga ya había logrado hacer caja de 55.000 dólares y eso que lo suyo hasta ahora no eran los torneos sino el cash por Internet. Como recuerda su padre para el site oficial del torneo, wsop.com, "en los estudios podía haber hecho lo que quisiera pero prefirió el póker. Demostró que era bastante bueno y decidimos apoyarle" comenta Luc Duhamel en referencia al abandono por parte de su hijo de los estudios universitarios por el póker en Internet, y en menor medida por los torneos, a los que desde lo de este fin de semana volverá con más asiduidad. Es más, ha prometido, por no decir amenazado; con volver el año que viene a jugar las Series Mundiales de Póker. Si volviera a ganar sería el primero en la historia en hacerlo.

Embajador

Ya más pausado, en la rueda de prensa posterior a la mesa final, el canadiense de moda, ha sido portada en buena parte de los medios de su país, de hecho es la primera vez que un canadiense logra tal hazaña; declaró que para él todo esto es completamente "irreal, nunca pensé que me pasaría. Es un sueño hecho realidad. Ahora mismo soy el tío más feliz del mundo" señalando además que tiene muy clara su nueva faceta de representante a nivel mundial de este deporte: "Lo voy a dar todo por ser el mejor embajador del póker. Para mí es un sueño realidad así que estoy listo para el reto."

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